El pasado 20 de noviembre, tuvo lugar la segunda mesa de trabajo sobre Residuos Alimentarios de Navarra en 2023, organizada por la OPREC y GAN-NIK. No solo tuvimos la oportunidad de conocer de cerca tres proyectos que están abordando el desperdicio alimentario en la Comunidad Foral, sino que también, llevamos a cabo un taller participativo enriquecedor gracias a todos los asistentes. El propósito central de este taller fue idear y priorizar acciones específicas que puedan ser desarrolladas durante el año 2024, consolidando así el compromiso colectivo en la lucha contra el desperdicio alimentario.
Iniciativas de Navarra
Navarra Zirkular
Delia Sola presentó Navarra Zirkular, iniciativa de colaboración público-privada para promover la adopción de la economía circular en las empresas navarras. Describió particularmente el servicio de Diagnóstico de Circularidad, que pretende facilitar y acompañar a las empresas cuando desean comenzar su transformación hacia un modelo económico circular.
Estudio de soluciones técnicas y de gestión para la valorización
Maite Laínez y Teresa Arriazu, técnicas del Consorcio Eder, adelantaron los resultados del «Estudio sobre soluciones técnicas y de gestión para la valorización del residuo agroalimentario en la Ribera de Navarra»
FOODRUS
Montse Guerrero, desde la Asociación de la Industria Navarra (AIN), hizo una presentación de FoodRUS, proyecto europeo que pretende abordar el desperdicio y las pérdidas de alimentos mediante la creación de sistemas alimentarios resilientes en nueve regiones europeas.
El taller participativo
El taller se estructuró en torno a cuatro dinámicas. En la primera, se llevó a cabo un ejercicio de convergencia destinado a identificar y destacar aquellos proyectos que los participantes consideran más relevantes. Este proceso permitió un intercambio de ideas valiosas, destacando las iniciativas que generaron un consenso general entre los presentes.
La segunda dinámica se centró en el establecimiento de colaboraciones y alianzas. Los participantes compartieron sus visiones sobre posibles asociaciones estratégicas que podrían fortalecer la efectividad de las acciones contra el desperdicio alimentario. Este ejercicio no solo propició la generación de ideas innovadoras, sino que también sentó las bases para futuras sinergias entre los diversos actores involucrados.
La tercera dinámica se enfocó en identificar y comprender las dificultades específicas que se presentan en el abordaje del desperdicio alimentario. Este ejercicio de reflexión colectiva permitió poner de relieve los desafíos prácticos y conceptuales que podrían obstaculizar el éxito de las iniciativas, sentando así las bases para estrategias más informadas y efectivas.
Finalmente, la cuarta dinámica se orientó a la definición de metas concretas. Los participantes compartieron sus aspiraciones y objetivos para el próximo año en relación con la reducción del desperdicio alimentario. Este ejercicio contribuyó a establecer un marco claro y ambicioso para guiar las acciones futuras, proporcionando un sentido colectivo de dirección y propósito.
En conjunto, este taller participativo no solo fomentó la interacción y colaboración entre las personas asistentes, sino que también generó ideas concretas y acciones prioritarias para impulsar la lucha contra el desperdicio alimentario en Navarra durante el año 2024.